En los últimos años se ha hablado mucho del emprendimiento, de personas dadas de alta en régimen de autónomo que tienen el ímpetu suficiente para montar un negocio y vivir por y para él. Pero ¿qué ocurre si esos hombres y mujeres valientes enferman o si tienen un accidente?
Al hacernos esa pregunta es cuando se pone de relieve la importancia de un buen seguro de salud. Y es que si como autónomo no puedes trabajar, tampoco generas ingresos, al no responder la Seguridad Social por ti (como sí ocurre en el caso de los asalariados).
Es por ello que a continuación vamos a desglosar cuatro buenas razones para contratar un seguro de salud si eres un trabajador por cuenta propia.
Rapidez de atención
“El otro día fui a urgencias al hospital y eché allí el día entero”. Seguro que alguna vez has escuchado una historia similar a esta que exponemos. Ciertamente, la sanidad pública está desbordada, sus profesionales dan lo mejor de sí pero, por norma general, faltan medios y recursos de lo más variados.
Al contratar un seguro privado estarás garantizando una rápida atención el día que tu salud sufra un revés. Y es que, aunque toquemos madera, todos estamos expuestos a enfermedades o accidentes en nuestro día a día.
Olvida las listas de espera en la recuperación
Tan importante es que un buen equipo de profesionales de la sanidad te atiendan cuando estás enfermo o has sufrido un accidente como que velen por tu recuperación. Al contratar un seguro médico te quitarás de encima el problema de las listas de espera, lo que te aporta tranquilidad y protección.
Hay que destacar que las coberturas dependen de la póliza concreta que el cliente desee contratar, pero que entre las más habituales están los primeros auxilios, la rehabilitación y la fisioterapia, las especialidades médicas, la medicina preventiva, las urgencias 24 horas, la hospitalización, el parto y posparto, entre otros.
Una rápida vuelta al trabajo
Un viejo refrán dice que el tiempo es oro, y los autónomos, cuando enferman, saben que esto es muy cierto. Por cada hora, cada día de trabajo que pierdan por un problema físico sus ingresos dejan de entrar (pero no por ello sus gastos se congelan).
Gracias a los servicios de los seguros privados, el paciente podrá mejorar su salud y volver a ejercer su actividad más rápido (lo que se traduce en una reactivación de la facturación y la generación de nuevos beneficios).
El seguro médico desgrava
El seguro de salud para trabajadores autónomos tiene determinadas ventajas fiscales que pueden resultar muy interesantes, entre las que destaca que es un gasto deducible. Conforme a la Ley 35/2006 del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. Según consta, el autónomo puede deducirse las primas satisfechas a una compañía de seguros médicos hasta 500 € anuales. Además, también se pueden beneficiar el cónyuge del autónomo así como los hijos menores de 25 años que vivan en el domicilio familiar.
¿Cómo elegir un seguro de salud para autónomos?
Como ocurre con cualquier seguro, es esencial contratar una póliza que se adapte bien a las necesidades que tenemos, en este caso como autónomos, y no debemos decantarnos por la oferta más barata.
De todas formas, muchas compañías tienen precios especiales para autónomos y pequeñas y medianas empresas. Solo habría que analizar cuáles son las necesidades sanitarias específicas (acorde a la profesión, principalmente) así como el presupuesto del que se dispone.